Apenas recuerdo tu cara. Y ahora que duermes despreocupado te odio, te odio por dejar que me olvide de ti. Por no hacer nada para evitar enterrar los días en los que estuvimos vivos.
Cuando nuestros ojos se hablaban, cuando nuestras palabras
se besaban, era el momento preciso de detener el tiempo. Lo intenté pero el
tiempo no tiene dueño y los momentos se me escapaban de entre los dedos como efímeras cenizas de unos recuerdos que un
día creímos nuestros.
Desde este lado de la cama da más miedo volver a la vida. A la
vida desnuda de ti.
El corazón helado late en silencio. Ya no te escucho.
como dice la banda uruguaya No te va a gustar en su canción "Chau": "Mire para mi derecha, vi que desaparecías, grité con todas mis fuerzas y note que no me oías"...impotencia pura! me encantó.
ResponderEliminargabi
Que pena llegar a esa situaciòn y ,por desgracia que fácil.
ResponderEliminarUn besazo enorme, hija.
Leonor